Cómo decidimos evaluar

La metodología parte con la realización de un diagnóstico organizacional. Es el análisis que se hace para evaluar la situación de la empresa, sus problemas, potencialidades y vías eventuales de desarrollo (Rodríguez, 2004). Para ello se requiere:

a) Recopilación de información:

Observación no participante: Consiste en la toma de contacto con la comunidad o grupo por parte del investigador, pero permaneciendo ajeno a la situación que observa. El carácter externo, no participante no quita que ella sea consciente, dirigida y ordenada hacia los fines de la investigación (Flores, 2006)

Entrevista semiestructurada: Esta entrevista adopta la forma de un diálogo informal. 

b) Por otra parte la evaluación de procesos se realizó durante el primer semestre del presente año –desde abril hasta junio-, constando de distintas etapas:

i. Diseñar los procesos: Se realizará un listado de los principales procesos que se requieren para la producción y distribución de los productos. También la enumeración de procesos de apoyo y definición de los objetivos de cada proceso; (Cohen y Martínez, 2004). 

ii. Hacer cronograma y ruta crítica: Se elaborará una Carta Gantt de los tiempos que demanda cada actividad y procesos durante la ejecución y operación; en el caso de la ruta crítica se definirán los tiempos mínimos necesarios para éstos.

iii. Diseñar la estructura organizacional: Se utilizará un organigrama que resuma gráficamente sus unidades y organizaciones. Se ubicará el nivel en que se toman las decisiones y se caracterizará la red de poder en la organización.

iv. Análisis del flujo organizacional: Permitirá analizar el flujo informacional, permitiendo contabilizar y jerarquizar los nodos. Esto posibilitará detectar y prever saturaciones intermedias innecesarias. 

v. Calcular los insumos: Se refiere a la especificación cuantitativa y cualitativa de los insumos –recursos humanos, materiales y financieros- según la relación insumo/producto que tenga. Para ello se utilizará un Esquema de cronograma y recursos (Cohen y Martínez).

vi. Reestructurar el modelo de focalización: Se revisará el modelo de focalización existente para visualizar errores de inclusión y exclusión de la población objetivo.

vii. Contribuir en la programación del monitoreo: Se establecerá un plan básico que evidencie los momentos en que se requiere información de monitoreo para realizar un seguimiento de los procesos, actividades y productos.

viii. Informe y discusión final: Se formulará un informe estableciendo una relación entre los resultados y las conclusiones del estudio.